Tirar del hilo de Andrea Camilleri es una de las últimas novelas en las que podremos disfrutar con nuestro Salvo Montalbano y trasladarnos en mente y espíritu por una Sicilia recreada prodigiosamente por el autor. Lo vamos a echar mucho de menos, porque cada año leer estas novelas es como reencontrarnos con seres muy queridos. La trama con ser importante, pierde su importancia, y nos inmiscuirnos en el ambiente y los avatares de estos personajes que nos resultan tan familiares. En este libro resulta muy curioso cómo Andrea Camilleri le hace dos guiños a su compañero y colega del norte.
Hasta la isla de Vigàta, en Sicilia, llegan numerosas pateras cargadas de inmigrantes. Personas que han conseguido sobrevivir a las terribles olas y a la larga hambruna. Sin embargo, a pesar de haber logrado su objetivo, ahora se encuentran sin medios ni garantías. Por es motivo, tanto el comisario como sus hombres se unen en el deber de ayudar. Como si esto no fuera suficiente, Montalbano tiene que acudir a las bodas de planta de unos amigos. Para la ocasión, acude a una de las más conocidas sastrerías de Vigàta y se pone en manos de Elena. Sin embargo, para su sorpresa, Elena aparece salvajemente asesinada con unas tijeras. Montalbano, con la inusual ayuda del gato de la víctima, se encargará de buscar al responsable del crimen.
